Programada para los días 19 a 26 de mayo como en años anteriores la Asociación de Amigos del Camino de Santiago de León ¨Pulchra Leonina¨ realizamos la peregrinación de primavera de 2024.
Cuarta etapa: Jaca a Puente la Reina de Jaca.
Desde el hotel que nos aloja estos días, partimos directamente para esta etapa. Hoy el Camino es bastante cómodo, sin necesidad de afrontar significativas curvas de nivel.
La primera parte nos lleva a Santa Cilia. Todo está cerrado, pero a la vista de que este primer tramo lo caminamos todos se deciden a aprovechar el rendimiento y abren uno de los establecimientos, no así la iglesia que alberga a la Santa.
A partir de aquí el grupo de peregrinos que formamos se reduce drásticamente y los de etapa completa se dirigen a Puente la Reina de Jaca.
La orografía es completamente diferente, se acabaron las grandes cumbres, ahora el protagonista principal y único es el río Aragón que ha configurado una gran depresión en cuyo fondo serpentea con notables arrastres.
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El itinerario oficial del Camino resulta que en su parte media está trazado junto al cauce del río, pero en su denso sotobosque cerrado por zarzas y malezas provocó la incertidumbre de encontrar salida o dejar la ropa en jirones en el intento.
El último tramo, sin embargo, es una senda muy cuidada y a la sombra de frondosos árboles.
A media tarde fue posible visitar el Monasterio de San Juan de la Peña y deambular, esta vez solamente con audioguías, entre las tumbas de varios reyes aragoneses.
Quinta Etapa: Puente la Reina de Jaca – Artieda.
El tránsito en esta etapa se hizo primero por la variante a través laderas boscosas del monte Samitier en que ya aparece el arbolado y vegetación mediterránea, hasta llegar al pueblecito de Arrés, subido en una colina, con casas robustas de mampostería, bien conservadas y una iglesia singular, de Santa Agueda.
El albergue permanece abierto, con bar incluido, y por gentileza de su responsable se pudo aliviar la sed y visitar la iglesia.
De Arrés se baja hacia los campos de siembra, de cereal, y por caminos de uso agrícola se llega a Artieda, teniendo a la vista, del otro lado del río, la población de Verdún encumbrada en un altozano.
El día es caluroso y no se ha encontrado otro cauce fluvial que el barranco de los Sobresechos o de Parueta, con tortuosa traza, por el que corre un agua cristalina que deja ver un lecho con estratos entre blanquecinos y azulados.
En Artieda también hay que recurrir al albergue porque es el único en el pueblo que ofrece bebida y comidas; plácidamente sentados tenemos a vista gran parte de la Canal de Verdún y la sierra de Leyre al norte.
Hoy cambiamos de lugar de alojamiento, a Sanguesa. Pero antes hacemos una visita al Monasterio de San Salvador de Leyre, considerado cuna del reino de Pamplona y Navarra; no se encontró ni dentro ni fuera del Monasterio al monje Virila que ha debido de asegurarse la eternidad….
Sexta Etapa: Ruesta – Sanguesa.
Iniciada en el pueblo de Ruesta, expropiado para construir el embalse de Yesa y ahora objeto de rescate y rehabilitación por el esfuerzo de la Confederación General del Trabajo y con intervención de la propia Confederación Hidrográfica del Ebro. Todo el caserío es de manpostería formando trama medieval en la que destaca una fortaleza islámica. De todo ello solo le quedan en pie las paredes exteriores, pero tiene restaurados algunos tramos de calle y unos pocos edificios que se destinan a servicios de albergue.
A la salida del pueblo se cruza el río Regal, el también arruinado camping y la ermita de Santiago.
A partir de aquí se sigue por anchos caminos que encaran la larga subida del monte Fenerol repoblado de pinares.
Después el camino ya discurre por su parte alta entre sembrados y baja al valle por terrenos que en otro tiempo estuvieron cuidados y hoy entregados al completo abandono.
La llegada al pueblo de Undués de Lerda, también situado en un alto, se hace por una trabajosa cuesta. En la Plaza Mayor visitamos la iglesia de San Martín, barroca.
Bajando de Undués por estrecha senda entramos en las tierras de labor y por caminos de concentración y paisaje un tanto anodino y monótono llegamos al final de etapa algo sofocados, pues la temperatura ha subido considerablemente.
La tarde la empleamos en pasear el pueblo de Sangüesa, localizando los edificios más singulares y su catedral, próxima al rio Aragón que, después de embalsado, no es más que triste figura de lo que fue.
La cena de despedida tuvo brindis, cánticos y larga sobremesa; es evidente que todos disfrutamos de la compañía de todos, quedando comprometidos a requerimiento del presidente, en retomar el Camino en la primavera que viene a la puerta de la catedral de Sanguesa.
El domingo es el día de regreso, ya no se camina más. Hay visita guiada al castillo de Javier, enclave histórico tan querido por los navarros, y luego solo autobús con parada en Logroño para comer.
Nuestro compañero Luis Marques Canedo, ha realizado un maravilloso montaje de video de esta Peregrinación, en este enlace, podéis admirar este magnífico trabajo:
https://www.youtube.com/watch?v=uijU2e48HpE
Texto: Juan Jesús Álvarez- Acevedo.
Fotografías. Ino Marcos.
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